Hoy
os traigo una estupenda
receta de magdalenas para disfrutar de la repostería casera.
Para que unas magdalenas
salgan altas y esponjosas se necesitan tres cosas: batir bien la masa,
poner un poco de azúcar por encima antes de hornear y conocer bien el horno
para tenerlo el tiempo necesario y con la temperatura adecuada.
- 250gr de azúcar
- 200gr
de aceite de oliva suave o de girasol
- 350gr de harina
de repostería
- 170gr
de leche
- 4 huevos
- La
piel de 1 limón grande, (solo la parte
amarilla)
- ½ cucharadita de canela en
polvo
- 1 pizca de Sal
- 1 sobre de levadura en
polvo
- 2 cucharadas de azúcar, para espolvorear por encima
Preparación:
Precalentar el horno a 220º deberá
estar a esa temperatura unos 15 o 20 minutos antes de meter las magdalenas, mientras
preparamos nuestra masa.
Se separan las yemas de las claras. En un
recipiente se baten las claras a punto de nieve con una pizca de sal (para que
quede consistente y también para que se monten más rápido) hasta conseguir un
merengue firme.
En otro recipiente se baten las yemas con
el azúcar hasta conseguir que se incorpore con el azúcar, se añade la ralladura
de limón, el aceite y la leche y se bate hasta que queda integrado, luego se le
incorpora la harina, mezclada con la canela y el sobre de levadura.
Cuando se ha integrado la harina, se
añaden unas cucharadas de las claras montadas que hemos reservado y se mezcla
bien todo, y por último se incorporan el resto y se mueve con suavidad. Hay que
procurar que quede homogénea, pero sin batir demasiado, para evitar que se bajen.
Se llenan los moldes de papel para magdalenas (yo las he llenado hasta el borde de papel y me han
salido 22 magdalenas) y metemos estos moldes en unas flaneras de metal (las mías son bastante grandes) o en las de papel de aluminio que
venden para hacer flanes.
Este es el secreto para que el molde de papel no se
abra y la magdalena crezca mucho hacia arriba.
Se espolvorea la superficie de las magdalenas con
azúcar, para que al subir la masa, se abra por varios sitios y no solo por un
lado y quede un crujiente de azúcar que le da un aspecto muy bueno .
Bajar el horno a 200º y hornear durante
unos 14-16 minutos o hasta que estén doradas. Ya sabéis que depende de cada horno.
Espero que os animéis a hacerlas y os gusten tanto como a mi !!